Rosa Parks, la indomable

Rosa Parks, la indomable

1 de diciembre de 1955.
Ese día por la tarde, una mujer de nombre Rosa Parks, una costurera de 42 años, tomó el autobús desde el trabajo a casa, se sentó en los asientos reservados por la ley a los blancos y, cuando el conductor le ordenó levantarse para cedérselo a un hombre blanco que estaba de pie, se negó. Dijo no porque, tal y como lo recordaba después Martin Luther King, no aguantaba más humillaciones, y eso es lo que le pedía “su sentido de dignidad y autoestima”. Rosa Parks fue detenida y comenzó un boicot espontáneo a ese sistema segregacionista que regía en los autobuses de la ciudad.